¿Para qué meditar?

Una de las actividades mentales a las que dedicamos más tiempo, es a planificar, a proyectar, para intentar lograr que sucedan aquellas cosas que nos gustan, que nos convengan, que nos hagan sentir felices. Pero, todo esto no es real, es una ilusión, nada más son deseos proyectados en el futuro.

La Meditación Advaita nos propone vivir el momento presente, libre de ataduras y de condicionamientos, tanto externos (como la educación que hemos recibido) como internos (como son mis creencias).

“Para qué Meditar?” no deja de ser una pregunta dirigida al futuro. Es una pregunta mental, implica la idea de nuestra mente de hacer algo ahora para cosechar algún fruto en el futuro.

Nosotros existimos y estamos única y exclusivamente en el aquí y ahora, no somos un proyecto a realizar en un futuro. Necesitamos descubrir que ya somos completos y plenos ahora. Y esto solo lo puedo experimentar aquí y ahora, en el eterno presente, donde la creación mental del tiempo no se interpone ni oculta aquello que ya es, aquello que ya soy.

La Meditación Advaita, más que algo que hay que hacer, es descubrir aquello que ya es, que ya soy, en su total pureza y realidad. Percibir eso que ya soy antes de que cualquier pensamiento interprete lo que percibo. Esa rutina mental de comentar y opinar sobre cualquier percepción crea una especie de puente entre pasado y futuro obviando el momento presente.

Por lo tanto, la pregunta “Para qué Meditar?” bien entendida, no nos debería llevar a un futuro. Sin mente nos lleva al presente, solo allí puedo encontrar lo que busco, a vivir plenamente aquello que ya soy y que todavía, al no haberlo experimentado, no puedo apenas imaginar. Soy Paz, Amor, Plenitud, Unidad. No es algo futuro que voy a lograr si me esfuerzo. Es lo que ya soy.